Paseando hacia el templo del Gran Buda nos encontramos el Hasedera. Un templo budista de la escuela Hodo, construido junto al mar y lleno de leyendas apasionantes.
Sus orígenes cuentan que en el año 721, un monje encontró un gran tronco. De este tronco, encargó tallar dos esculturas de la diosa Kanon de 11 cabezas, la diosa de la bondad. Una de ellas, se quedó en el templo Hasedera, en las cercanías de Nara. En cambio, la otra fue lanzada al mar. A ésta, la acompañaba una plegaria que pedía que apareciera en otro lugar, para salvar a la gente. Y así lo hizo, quince años más tarde, en 736, cuando reflotó y llegó a las orillas de una playa cercana a Kamakura. En su honor, se alzó el actual templo de Hasedera en Kamakura.
La escultura de la diosa Kannon, mide 9,18 metros. Tiene con 11 cabezas más pequeñas, adjuntas a la cabeza principal, formando una especie de corona o tiara de la diosa. En 1342 fue recubierta de oro, y en 1392 se le añadió el halo trasero.
El Jardín de Hasedera
El jardín del recinto es precioso en cualquier estación del año. Cerezos y ciruelos en flor en primavera, hortensias y lirios en verano, arces y hojas rojas en otoño, y sus estanques y tejados bajo un manto de nieve, lo en una visita imperdible para cualquier visitante que esté de paso por la ciudad.
* Algunas de la imágenes originales usadas en este artículo forman parte de la Wikimedia Commons, de Flickr: The Commons y de la galería de David Esteban. Se pueden encontrar aquí, aquí, aquí, aquí, y aquí.